Ficha Técnica:
-Título original: Fright Night.
-Año: 2011.
-Duración: 106 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Craig Gillespie.
-Guión: Marti Noxon, según el remake de Tom Holland.
-Música: Ramin Djawadi.
-Fotografía: Javier Aguirresarobe.
-Reparto: Anton Yelchi, Colin Farrell, David Tennant, Imogen Poots, Toni Colette, Christopher Mintz-Plasse, Dave Franco.
-Productora: DreamWorks SKG / Gaeta / Rosenzweig Films / Michael De Luca Productions / Reliance Big Entertainment.
-Sinopsis: Charlie está en su último año de instituto y ha conseguido popularidad gracias a su amistad con nuevos amigos y una novia atractiva. Sin embargo, su mejor amigo de la infancia, Ed, cuya pasada amistad quiere olvidar por sus connotaciones frikies, le alerta del extraño comportamiento de su nuevo vecino, Jerry; un soltero atractivo y simpático que parece caerle bien a todo el mundo. Después de espiarle, descubre que realmente su vecino es un vampiro. Ante la increludidad de todos, Charlie se las apañará para buscar una solución y terminar con el monstruo que tiene por vecino.
Personajes:
Crítica:
Ultimamente los remakes que se están haciendo de grandes películas no están siendo muy acertadas desde mi punto de vista. Se empeñan en intentar mejorar películas clásicas, iconos de la historia del cine, dándole una nueva imagen más moderna. Sin embargo, debo reconocer que en esta acertaron y eso que en la taquilla pinchó (21 millones de espectadores)
Un lavado de cara para una de las películas claves del género vampírico ochentero, que marcó una nueva faceta, donde se mezclaba el terror y la comedia de modo coherente.
Aunque esta no tiene el sentido del humor de su predecesora y en muchos aspectos se presenta más oscura, debo reconocer que lo compensa otros muchos aspectos, que la convierten en una digna heredera. Una fotografía del excelente director vasco Javier Aguirresarobe, que ya había trabajado en películas del género, como "Eclipse" y "Luna Nueva" y le confiere, como es propio en su trayectoria, juego de luces y sombras que hablan como un personaje más de la trama, sobre la escena que se vive en cada instante (véase el final, por ejemplo, en el sótano de Jerry o la habitación secreta, blanca y brillante donde escondía a sus víctimas).
También destacaría el personaje de Collin Farrell. Como amante de los vampiros, me fijo mucho en ellos, claro. Un digno vampiro que podría darle más de una lección a los últimos que han salido y que se vanaglorian de ser seres malévolos, oscuros y calculadores, sin llegar ni siquiera a conseguirlo de lejos. Me gusta el magnetismo de este Jerry y la verdadera naturaleza que esconde. Aunque pierde el sentido del humor del primero, gana en crueldad y en atractivo (esa camiseta de asillas al principio, no sólo deja sin habla a la madre y a la novia de Charlie)
Por cierto y hablando del vampiro de la primera versión de 1985, Chris Sarandon, hay que estar pendientes, porque hace un cameo en este remake.
Algunos de los personajes secundarios pierden su atractivo y el magnetismo de la primera versión, como el amigo frikie de Charlie que, aunque tiene mayor importancia en esta, no engancha de la misma manera y la novia super perfecta de esta, no convence de la misma forma que en la anterior.
Incluso el personaje de Peter Vincent, al que quisieron dotarlo de mayor modernidad con un espectáculo de magia y vampirismo que fuerzan demasiado, sólo consigue engancharnos de algún modo en las últimas escenas, dejándonos un tanto fríos en la interpretación como en ciertos diálogos en los que pierde gracia.
Algunas escenas se inspiraron en la anterior, aunque dándoles un tono más moderno, como la de la discoteca. En la versión del 85, era quizá más "romántica", con ese baile que parece tornurar al protagonista hasta perder a su novia en brazos de su enemigo, mientras que esta es más explícita en su sensualidad, aunque igual de impactante.
Volverá a pasar por la pantalla de mi televisor muchas veces más, sin lugar a dudas.
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