Ficha Técnica:
-Título original: Brotherhood of Blood.
-Año: 2007.
-Duración: 90 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Michael Roesch, Peter Scheerer.
-Guión: Michael Roesch, Peter Scheerer.
-Música: Tom Bimmermann, Ralph Rieckermann.
-Fotografía: River O'Mahoney Hagg, River Mahoney.
-Reparto: Victoria Pratt, Sid Haig, Ken Foree, Jason Connery, William Snow, Wes Ramsey, Jeremy James Kissner, Jack Donner.
-Sinopsis: Un grupo de cazavampiros se enfrenta al rey de los vampiros, Pashek, después de haber aceptado la misión de salvar al hermano de un hombre de negocios, que había viajado a Rumanía. Sin embargo, la situación se complia al descubrir que el demonios de los vampiros, Vlad Kossei, puede renacer a través del hermano de su cliente.
Protagonistas:
Crítica:
Películas como ésta, hacen que los vampiros tengan tan mala fama entre los críticos de hoy en día. La historia es absurda y el guión está cargado de altibajos, que van cada vez más bajos a medida que transcurre el metraje. Aún resulta más increible pensar que encima, fue proyectada en el festival de Sitgets del 2007.
Aburrida, sin sentido y con unos actores poco creibles, empezando por la actriz principal. Aunque su papel debería de ser de mujer dura, lo cierto es que se queda en una tía amargada y cruel. Hay actores como Sid Haig o Ken Foree, que son importantes como secundarios y cuyos papeles aquí, no sólo defraudan sino que son poco creibles (más si cabe, tratándose del género que nos lleva)
No hablemos del maquillaje. Aunque ciertos detalles gores están bien para una película de serie B, se podían haber esmerado un poco más con una cosa tan importante como los colmillos de los vampiros. ¡¡¡Si casi no pueden hablar de lo grande que son!!!
Se podría haber sacado provecho a la relación de Carrie y el de uno de los vampiros, que había sido su novio cuando era humano o el de ella con su cliente, que busca a su hermano para salvarlo de los vampiros. Sin embargo, se queda en mera curiosidad, sin repercutir con el resto de la historia.
El final es previsible y resulta hasta cómico el modo en que dejan una puerta abierta hacia...¿una continuación? El mundo no puede ser más cruel.
La violencia de los cazadores es mayor que la de los vampiros y se matan con tanta facilidad, que hasta terminan dándote pena.
Una película de terror que no transmite sino risa y cansancio. La tensión se ve antes de llegar y la historia, está demasiado mascada para sorprendernos.
domingo, 30 de septiembre de 2012
sábado, 29 de septiembre de 2012
Libro. El Pasaje. Justin Cronin
Una expedición científica, encuentra en mitad del Amazonas, una sustancia que podría aumentar la longevidad y por tanto, la inmortalidad. Con fines militares, se experimetará con ella en una base de Colorado, donde doce convictos del corredor de la muerte, se convertirán en conejillo de indias. Pero todo cambia cuando el jefe del proyecto, desea experimentar con un niño. Amy, una huérfana de nueve años, es la elegida. Brad Wolgast, es el agente encargado de llevarla a la base, pero el remordimiento y sus propios fantasmas interiores, hace que intente escapar con la niña para salvarla.
La base, no guarda la suficiente seguridad para hacer frente a lo que se avecina y los prisioneros, ahora convertidos en seres deformes y sedientos de sangre, se escapan, propagando a toda velocidad el virus. El mundo se convierte en un vago recuerdo de lo que era y los supervivientes, deberán luchar por superar cada noche, el ataque de los vampiros que esperan, tras los muros de La Comuna.
Algo sobre el autor:
Justin Cronin, nació en Nueva Inglaterra en 1962. Es porfesor de inglés en la Rice University de Houston, donde vive con su familia.
Su primera novela fue Mary and O'Neil que le valió varios premios. Después escribió la elogiada The Summer Guest, publicada en 2004 y en 2010, The Passage (El Pasaje), publicada en España por la editorial Umbries Editores.
Desde su salida, se convirtió en un bestseller y alcanzó el número tercero, en las listas de los libros más vendido, por el New York Time. Los siguientes números para esta obra, que ha creado como una extensa trilogía son: The Twelve, que será publicada en 2012 y The City of Mirrors.
La novela:
Esta extensa novela de unas 1088 páginas, podríamos dividirla en tres parte, según la evolución de la historia.
En la primera, conocemos el origen de esa planta milagrosa, que con fines siempre armamentísticos, intentan prolongar la vida de los soldados en combate. La base militar de Colorado, donde se experimenta con ella, es testigo de la evolución de doce convictos, que eligen voluntariamente acceder a ser conejillos de indias, en vez de cruzar el corredor de la muerte. Destaca entre ello, el personaje de Babcock, que será clave en ciertos momentos de la historia.
En la segunda parte del libro y quizá una de las hermosas, se relata la huída de Wolgast y Amy, a una cabaña apartada, durante la propagación del virus. Maravilloso, como el autor nos desvela, desde un lugar apartado, entre periódicos y viajeros inesperados, cómo el mundo está siendo destruido por un virus imparable.
En la tercera parte y la más extensa, nos encontramos con un nuevo mundo post apocalíptico. Han transcurrido unos cien años y los niños que terminaron en California, crean las familias princiales, que formarán La Comuna.
Entre desechos de un pasado que a penas entienden y cadáveres carbonizados por el tiempo (los "flacuchos"), los protagonistas de esta parte de la historia, intentan sobrevivir a la noche, donde se cuelan los vampiros, también llamados "pitillos", "virales" y hasta "dragones".
Expediciones que no regresan, baterias que se desgastan con una rapidez angustiosa y el encuentro con una extraña chica; una "caminante", hará que cambie la frágil convivencia que existía entre ellos.
Aunque la pomposidad de nombres y el lío de familias se hace en algunos momentos un tanto complicado, pronto descubrimos a los verdaderos protagonistas, que emprenderán un difícil camino, buscando con desesperación, una respuesta que les ayude a sobrevivir a un fin que parece inevitable.
Más de mil páginas para un libro que engancha desde el principio. Una prosa limpia y sencilla, que nos hace más fácil su lectura. Una historia que no aburre, porque este libro-guión, siempre nos hace pedir más y el autor, nos lo ofrece con creces.
Si hay alguna pega, diría que cuanto más aumenta la tensión de las escenas, se pierde un poco, describiendo personajes con demasiada profundidad, incluso aquellos que no llegan ni al estátus de secundarios, volviéndose en ocasiones un tanto cadencioso y monótono.
Ridley Scott ha comprado los derechos del film. Será llevado al cine por Matt Reeves, director de películas como la insufrible Monstruoso y la versión america de Déjame Entrar. Con un guión revisado por John Logan, recientemente se ha incorporado Jason D. Keller.
Ya veremos cómo se las arreglan para adaptar una obra tan extensa en un film, sin que la destrocen demasiado.
En definitiva, obra clave en cualquier biblioteca que se precie, con un hueco muy grande, eso si. Para los seguidores de esa lectura de enganche que no puedes dejar de leer, y para los amantes de los vampiros, en todas sus formar y creencias.
sábado, 8 de septiembre de 2012
Abraham Lincoln: Cazador de vampiros. Película.
Ficha Técnica:
-Título original: Abraham Lincoln: Vampire Hunter.
-Año: 2012.
-Duración: 105 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Timur Bekmambetov.
-Guión: Seth Grahame-Smith, Simon Kinberg, según la novela de Seth Grahame-Smith.
-Música: Henry Jackman.
-Fotografía: Caleb Deschanel.
-Reparto: Benjamin Walker, Dominic Cooper, Mary Elizabeth Winstead, Rufus Sewell, Alan Tudyk, Anthony Mackie, Robin Mackie, Robin MacLeavy, Jaqueline Fleming, Jimmi Simpson.
Sinopsis: La madre de Abrahan Lincoln, es asesinada por un vampiros cuando este es pequeño. Buscando la venganza, conoce a Henry Sturgess, que le enseñará cómo matarlos. En el camino, conocerá todo un submundo dentro de la sociedad de los chupasangre, que planean convertir América, en un gran almacén. Lincoln guardará su hacha, para acabar con ello a través de la palabra.
Protagonistas:
Crítica:
Uno es incapaz de sentirse estafada al pagar por ver esta película, porque sabe con lo que se va a encontrar: una historia disparatada, muchos efectos especiales, vampiros, mucha sangre, una sala muy oscura, palomitas de maiz y alguien que murmura un "se pasaron" en algún momento del metraje.
Por eso, no entiendo por qué muchos se empeñan en criticarla como si sintiesen que el director se tomase muy en serio la historia. Timur Bekmambetov, no es precisamente un director que se caracterice por hacer de sus historias algo creible; creo que ni se esfuerza por intentarlo. Sólo hay que recordar los efectos distaratados que se podían conseguir con una pistola en Wanted (2008) o la locura sin posible descripción lógica, que suponen Guardianes de la Noche (2004) y Guardianes del Día (2006).
Sus películas se caracterizan por una orgia visual, desparrame de efectos especiales, historias absurdas, protagonistas que se toman en serio una misión sin sentido, mucha violencia y la excesiva cámara lenta, que muchas veces aburre.
Y todas ella se dan en esta película, que lleva además, el sello de Tim Burton, que sin echarnos las manos a la cabeza, le va como anillo al dedo.
La editorial Quirk Books, ha promovido con bastante éxito, este tipo de historias, en las que se mezclan hechos y personajes reales, con los monstruos de toda la vida. Sin ir más lejos, el autor de Abrahan Lincoln:Cazador de vampiros, Seth Grahame-Smith, que además firma como co-guionista, ya había conseguido éxito con su: Orgullo y prejucio y zombie (2009), que fue la encargada de arrancar con este tipo de historias. Ejemplo de otros que se han lanzado son: Sentido y sensibilidad y monstruos marinos (2009) y Android Karenina (2010), de Ben H. Winters.
Pero que nadie piense que de repente Quirk Books y Seth Grahame-Smith son de lo más originales. En 1960, el español Juan Perucho, en su libro Las Historias Naturales, describe como un intento de vampirismo por parte de un vampiro llamado Onofre de Dip, fue el responsable de que el general Cabrera, en la Primer Guerra Carlista, no pudiese culminar su ofensiva de entrar en Cataluña. Algo que como podemos ver, convierte las historias venideras, en simples copias.
Lo que sí se le puede atribuir tanto al libro como a la película que nos trae a este reportaje, es una historia original. Nos da una explicación a la inspiración (muy fantástica, esos sí) que llevó a Abrahan Lincoln a luchar contra la esclavitud y defender un pueblo, que sin saberlo, estaba siendo conquistado por los vampiros.
Son realmente sorprendentes y al mismo tiempo terroríficas (no porque nos de miedo), algunas escenas, en los que atiborra al espectador de tantos efectos especiales, que nos perdemos en las escenas. La sencuencia de los caballos es demasiado catastrófica y la cámara lenta, no ayuda mucho a su entendimiento. Otra es la del puente en llamas del final...¿en serio?.
Sin embargo, la forma fantástica y tremendamente ficticia con la que el presidente decimosexto de los Estados Unidos maneja el hacha, me ha gustado (aunque como amante de los vampiros, me cueste admitirlo)
El maquillaje es otra de las pegas de la película. Todo lo que se gastaron en el del presidente para caracteriazarlo a él y al paso del tiempo, lo ahorraron para el resto, a quienes sólo les tiñeron algunas canas y un par de arrugas con pegamento.
Y aún así, la transformación de los vampiros, mostrando esos dientes prominentes y un rostro distorsionado, me pone los pelos de punta. No puedo evitar emocionarme por la imaginación que tienen muchos maquilladores para sacar de un hombre normal, al mosntruo que llevan dentro.
Una película entretenida, que no hay que tomarse en serio, pero con la que se podrá matar un poco el tiempo (con perdón por los vampiros)
Tal vez sin querer, fui yo una de las que en el cine murmuré eso de "se pasaron".
-Título original: Abraham Lincoln: Vampire Hunter.
-Año: 2012.
-Duración: 105 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Timur Bekmambetov.
-Guión: Seth Grahame-Smith, Simon Kinberg, según la novela de Seth Grahame-Smith.
-Música: Henry Jackman.
-Fotografía: Caleb Deschanel.
-Reparto: Benjamin Walker, Dominic Cooper, Mary Elizabeth Winstead, Rufus Sewell, Alan Tudyk, Anthony Mackie, Robin Mackie, Robin MacLeavy, Jaqueline Fleming, Jimmi Simpson.
Sinopsis: La madre de Abrahan Lincoln, es asesinada por un vampiros cuando este es pequeño. Buscando la venganza, conoce a Henry Sturgess, que le enseñará cómo matarlos. En el camino, conocerá todo un submundo dentro de la sociedad de los chupasangre, que planean convertir América, en un gran almacén. Lincoln guardará su hacha, para acabar con ello a través de la palabra.
Protagonistas:
Crítica:
Uno es incapaz de sentirse estafada al pagar por ver esta película, porque sabe con lo que se va a encontrar: una historia disparatada, muchos efectos especiales, vampiros, mucha sangre, una sala muy oscura, palomitas de maiz y alguien que murmura un "se pasaron" en algún momento del metraje.
Por eso, no entiendo por qué muchos se empeñan en criticarla como si sintiesen que el director se tomase muy en serio la historia. Timur Bekmambetov, no es precisamente un director que se caracterice por hacer de sus historias algo creible; creo que ni se esfuerza por intentarlo. Sólo hay que recordar los efectos distaratados que se podían conseguir con una pistola en Wanted (2008) o la locura sin posible descripción lógica, que suponen Guardianes de la Noche (2004) y Guardianes del Día (2006).
Sus películas se caracterizan por una orgia visual, desparrame de efectos especiales, historias absurdas, protagonistas que se toman en serio una misión sin sentido, mucha violencia y la excesiva cámara lenta, que muchas veces aburre.
Y todas ella se dan en esta película, que lleva además, el sello de Tim Burton, que sin echarnos las manos a la cabeza, le va como anillo al dedo.
La editorial Quirk Books, ha promovido con bastante éxito, este tipo de historias, en las que se mezclan hechos y personajes reales, con los monstruos de toda la vida. Sin ir más lejos, el autor de Abrahan Lincoln:Cazador de vampiros, Seth Grahame-Smith, que además firma como co-guionista, ya había conseguido éxito con su: Orgullo y prejucio y zombie (2009), que fue la encargada de arrancar con este tipo de historias. Ejemplo de otros que se han lanzado son: Sentido y sensibilidad y monstruos marinos (2009) y Android Karenina (2010), de Ben H. Winters.
Pero que nadie piense que de repente Quirk Books y Seth Grahame-Smith son de lo más originales. En 1960, el español Juan Perucho, en su libro Las Historias Naturales, describe como un intento de vampirismo por parte de un vampiro llamado Onofre de Dip, fue el responsable de que el general Cabrera, en la Primer Guerra Carlista, no pudiese culminar su ofensiva de entrar en Cataluña. Algo que como podemos ver, convierte las historias venideras, en simples copias.
Lo que sí se le puede atribuir tanto al libro como a la película que nos trae a este reportaje, es una historia original. Nos da una explicación a la inspiración (muy fantástica, esos sí) que llevó a Abrahan Lincoln a luchar contra la esclavitud y defender un pueblo, que sin saberlo, estaba siendo conquistado por los vampiros.
Son realmente sorprendentes y al mismo tiempo terroríficas (no porque nos de miedo), algunas escenas, en los que atiborra al espectador de tantos efectos especiales, que nos perdemos en las escenas. La sencuencia de los caballos es demasiado catastrófica y la cámara lenta, no ayuda mucho a su entendimiento. Otra es la del puente en llamas del final...¿en serio?.
Sin embargo, la forma fantástica y tremendamente ficticia con la que el presidente decimosexto de los Estados Unidos maneja el hacha, me ha gustado (aunque como amante de los vampiros, me cueste admitirlo)
El maquillaje es otra de las pegas de la película. Todo lo que se gastaron en el del presidente para caracteriazarlo a él y al paso del tiempo, lo ahorraron para el resto, a quienes sólo les tiñeron algunas canas y un par de arrugas con pegamento.
Y aún así, la transformación de los vampiros, mostrando esos dientes prominentes y un rostro distorsionado, me pone los pelos de punta. No puedo evitar emocionarme por la imaginación que tienen muchos maquilladores para sacar de un hombre normal, al mosntruo que llevan dentro.
Una película entretenida, que no hay que tomarse en serio, pero con la que se podrá matar un poco el tiempo (con perdón por los vampiros)
Tal vez sin querer, fui yo una de las que en el cine murmuré eso de "se pasaron".
miércoles, 5 de septiembre de 2012
Midnight Son. Película.
Ficha Técnica:
-Título original: Midnight Son.
-Año: 2011.
-Duración: 88 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Scott Leberecht.
-Guión: Scott Leberecht.
-Música: Kays Al-Atrakchi, Geoff Levin.
-Fotografía: Lyn Moncrief.
-Reparto: Tracey Walter, Zak Kilberg, Jo D. Jonz, Maya Parish, Arlen Escarpeta, Larry Cedar, Shawn-Caulin Young, Juanita Jennings, Kevin McCorkle, Tony Norris.
-Sinopsis: Jacob trabaja como segurita nocturno, porque tiene una enfermedad en la piel que le impide exponerse a la luz solar. Su cuerpo va cambiando, adquiriendo nuevos hábitos de alimentación basados en la sangre. Mientras esto sucede, conoce a María, de la que se enamora, mientras sus cambios van en aumento y la policía le persigue, como sospechoso de unos asesinatos.
Protagonistas:
Crítica:
(contiene spoiler)
Película independiente, que trata el tema del vampirismo como una enfermedad.
Debut del director Scott Leberecht, que ya había realizado un par de cortos, como "Under Dog" y "Natural Selection", además de haber trabajado como director artístico en películas como "Sleepy Hollow" y "Spawn".
Su protagonista, Jacob, ha hecho de su casa, su trabajo y su vida, una eterna noche, dada una enfermedad que sabemos que tiene desde niño y que le quema literalmente la piel.
Su compañero de trabajo, un viejo limpiador que le intenta dar conversación para pasar las horas muertas, alude en algún momento a su edad y que todavía puede crecer. Es a partir de entonces, cuando su cuerpo empieza a notar cambios significativos. La comida parece no llenarle, aunque vemos que es capaz de devorar todo lo que guarda en la nevera, sufre de anemia y las ojeras acompañan a un cuerpo flaco y desnutrido.
Mientras va descubriendo con preocupación, que lo único que parece llenarle es la sangre, tanto él como el espectador, descubrimos que los síntomas, se acercan más al vampiro que a otro tipo de mal más científico (maravillosa la escena en la que prueba por primera vez la sangre humana)
Mientras esto sucede y tanto su cuerpo como su mente le juegan malas pasadas, conoce a María, un chica de la que se enamora, pero de la que intenta escapar por miedo a hacerle daño.
En realidad, todas las personas que le rodean son de algún modo como él; animales nocturnos que como dice, esconden algo que no desean mostrar a los demás. El carnicero que le vende sangre sin hacer preguntas, el enfermero que trafica con basura del hospital, la propia María, que utiliza su timidez como excusa para drogarse.
El vampirismo se convierte en una enfermedad que se transmite por el mordisco y fascina, el modo con el que el director lo plantea, hasta creer que puede ser más creible, que el hecho de que un hombre muerto, deambule por el mundo eternamente.
Que nadie me malinterprete. Ya sabemos que los vampiros no existen y sin embargo, el intimismo de las imágines, las palabras que no se dicen y que de algún modo, parecemos escucharlas en el silencio de ciertas escenas, la soledad del hombre, que es aún más intensa en la oscuridad de la noche, el miedo a descubrir más y la realidad de lo inevitable. Todos eso se plantean en esta película que me ha parecido un adorable homenaje a una Carmilla del siglo XX, con una escena final de lo más fascinante.
Un cuento sangriento, que merece la pena ver.
Pincha aquí para ver el trailer.
-Título original: Midnight Son.
-Año: 2011.
-Duración: 88 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Scott Leberecht.
-Guión: Scott Leberecht.
-Música: Kays Al-Atrakchi, Geoff Levin.
-Fotografía: Lyn Moncrief.
-Reparto: Tracey Walter, Zak Kilberg, Jo D. Jonz, Maya Parish, Arlen Escarpeta, Larry Cedar, Shawn-Caulin Young, Juanita Jennings, Kevin McCorkle, Tony Norris.
-Sinopsis: Jacob trabaja como segurita nocturno, porque tiene una enfermedad en la piel que le impide exponerse a la luz solar. Su cuerpo va cambiando, adquiriendo nuevos hábitos de alimentación basados en la sangre. Mientras esto sucede, conoce a María, de la que se enamora, mientras sus cambios van en aumento y la policía le persigue, como sospechoso de unos asesinatos.
Protagonistas:
Crítica:
(contiene spoiler)
Película independiente, que trata el tema del vampirismo como una enfermedad.
Debut del director Scott Leberecht, que ya había realizado un par de cortos, como "Under Dog" y "Natural Selection", además de haber trabajado como director artístico en películas como "Sleepy Hollow" y "Spawn".
Su protagonista, Jacob, ha hecho de su casa, su trabajo y su vida, una eterna noche, dada una enfermedad que sabemos que tiene desde niño y que le quema literalmente la piel.
Su compañero de trabajo, un viejo limpiador que le intenta dar conversación para pasar las horas muertas, alude en algún momento a su edad y que todavía puede crecer. Es a partir de entonces, cuando su cuerpo empieza a notar cambios significativos. La comida parece no llenarle, aunque vemos que es capaz de devorar todo lo que guarda en la nevera, sufre de anemia y las ojeras acompañan a un cuerpo flaco y desnutrido.
Mientras va descubriendo con preocupación, que lo único que parece llenarle es la sangre, tanto él como el espectador, descubrimos que los síntomas, se acercan más al vampiro que a otro tipo de mal más científico (maravillosa la escena en la que prueba por primera vez la sangre humana)
Mientras esto sucede y tanto su cuerpo como su mente le juegan malas pasadas, conoce a María, un chica de la que se enamora, pero de la que intenta escapar por miedo a hacerle daño.
En realidad, todas las personas que le rodean son de algún modo como él; animales nocturnos que como dice, esconden algo que no desean mostrar a los demás. El carnicero que le vende sangre sin hacer preguntas, el enfermero que trafica con basura del hospital, la propia María, que utiliza su timidez como excusa para drogarse.
El vampirismo se convierte en una enfermedad que se transmite por el mordisco y fascina, el modo con el que el director lo plantea, hasta creer que puede ser más creible, que el hecho de que un hombre muerto, deambule por el mundo eternamente.
Que nadie me malinterprete. Ya sabemos que los vampiros no existen y sin embargo, el intimismo de las imágines, las palabras que no se dicen y que de algún modo, parecemos escucharlas en el silencio de ciertas escenas, la soledad del hombre, que es aún más intensa en la oscuridad de la noche, el miedo a descubrir más y la realidad de lo inevitable. Todos eso se plantean en esta película que me ha parecido un adorable homenaje a una Carmilla del siglo XX, con una escena final de lo más fascinante.
Un cuento sangriento, que merece la pena ver.
Pincha aquí para ver el trailer.
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