domingo, 28 de octubre de 2012

Película. Dracula 2000

Ficha Técnica:

-Título original: Dracula 2000 (Drácula 2001 en España)
-Año: 2000.
-Duración: 99 minutos.
-País: Estados Unidos.
-Dirección: Patrick Lussier.
-Guión: Joel Soisson, según la historia Patrick Lussier y Joel Soisson.
-Música: Marco Beltrami.
-Fotografía: Peter Pau.
-Reparto:Christopher Plummer, Gerard Butler, Jonny Lee Miller, Justine Waddell, Jennifer Esposito, Omar Epps, Jeri Ryan, Colleen Fitzpatrick, Lochlyn Munro, Sean Patrick Thomas, Shane West, Natha Fillion.
-Sinopsis: Unos ladrones entran a robar en la mansión de Matthew Van Helsing, despertando a Dracula, que llevaba unos cien años confinado en un ataúd. En Nueva Orleans, buscará a la única mujer con la que se siente conectado, mientras el cazador que prometió acabar con él, lo persigue para salvarla.

Personajes:


Crítica:

          Redescubrir esta película después de tanto tiempo, me ha hecho confirmar que el tiempo ha pasado bien por ella. Sin ser una obra maestra, puede considerarse una película entretenida y que da una buena explicación al mito del vampiro. Una que sin lugar a dudas, es de las más lógicas que se han realizado. Dracula es en realidad Judas Iscariote, cosa lógica si tenemos en cuenta muchos de los objetos por los que siente aversión. La cruz, la plata, precedido siempre por el símbolo de la traición, que le hace un ser atormentado, prisionero entre un cielo y un infierno que le cierran las puertas.
         Aunque empieza con ritmo y buen material, la historia va perdiendo tirón. La protagonista, un tanto sosa y que no se adapta a la inocencia y la sensualidad requeridas, traiciona con tanta facilidad al objeto que le obsesionaba en sueños desde siempre, que chocamos de pronto con la nefasta realidad; una película tipo Screem, creada para entretener a adolescentes. Lo que se dice una "típica película americana". Pues aunque Wes Craven no actúa de director en ésta, sí lo hace como productor ejecutivo.
Y es una pena, no sólo por la originalidad del mito del que hablábamos, sino por un Gerarld Butler, que le da a Drácula, un aire seductor, como pocos (¡madre mía cuando con un solo un gesto, atrae a las mujeres!...¡Es que no le hace falta ser vampiro para hacerlo!). Aporta cierto clasicismo. Como en los vampiros antiguos, no le hace falta hablar mucho, tiene sus objetivos marcados como una obsesión y carece de humanidad, aportando también, un toque moderno, en un vestuario que conserva el negro y hasta una capa-chaqueta, con la que interactua su personaje en ciertos momentos (atrapa a la chica con ella en el cementerio)
        Cierta sensualidad que se marca en escena como la posesión de Lucy y en la que terminan hasta flotando en el aire o en la escena en que le da su sangre a Mary, al estilo de la película de Coppola, pero en el cuello en lugar del pecho (una imagen un tanto desesperada y sin mucha repercusión)
        Y de lo clásico, también podemos hablar de los constanes guiños a la obra de Bram Stoker. En primer lugar, los nombres de los protagonistas (sólo faltó que Simon se llamase Jonathan Harker, para completarlos), el comentario de Matthew sobre su antepasado, que llevó al autor de Drácula, a inspirarse en él, la recreación de parte del relato, como el viaje a Inglaterra en el Demeter y sobre todo, las características rescatadas del clásico en cuanto al personaje de Drácula, como sus metamorfosis en humo y en animal salvaje.
        Destaca la actuación de Christopher Plummer, que está por encima del resto. Una pena que no se le sacase mayor provecho.
        El traslado de la ambientación de Londres a Nueva Orleans, la cuna de los vampiros gracias a Anne Rice, antes de que Stephenie Meyer los hiciese viajar a Forks. El colorismo de los collares, el bullicio de la fiesta, lo hacen un lugar perfecto para Drácula y su idea de la perdición de los seres humanos.     
        El director acentúa ciertas escenas con picados y contrapicados que dan mayor dramatismo, como la parte final, en el tejado del edificio.
        Encontramos escenas claves demasidas coloristas, que junto con una música demasiado estridente, la convierten en un gran videoclips musical.
        Aún así y quitando estos detalles que hacen un quiero y no puedo, debo reconocer que volveré a verla, con la confirmación de que es una buena y entretenida película de vampiros.

 Picha aquí para ver el trailer.

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